Es normal que las parejas discutan o que tengan ciertos momentos en donde no están de acuerdo en algo. Pero eso no quiere decir que vaya a mantenerse por mucho tiempo, sino que cuando una pareja es feliz, pide perdón al otro y continúan con su relación de forma sana y equilibrada.
En ocasiones, es la falta de comunicación y de perdón, de aceptar las situaciones las que lleva a que el amor en la pareja se desgaste por completo, se termine. Son pequeños detalles que van haciendo daño y que podemos pensar que no tienen ninguna importancia, pero realmente a la larga si la van a tener.
Entonces, visto toda esta situación, pedir perdón desde luego que vale la pena. Pero para conseguirlo hay que hacer algunas acciones para que realmente sintamos que estamos haciendo algo válido.
Lo primero es eliminar por completo el prejuicio que tenemos en nuestra cabeza y el admitir de verdad que el pedir perdón no es algo malo. No por ello vamos a humillarnos ni vamos a colocarnos en una posición incorrecta en nuestra vida.
Todo será muy lejos de ello. Cuando pedimos perdón, lo que sucede es que nos mostramos tal y como somos y nos hace desde luego mejores personas.
El otro, va a percibirnos de tal forma que va a entender que estás haciendo un esfuerzo y que se han tenido en cuenta sus sentimientos.
También demostrará que existe una intención real de hacer cambios y que hay una necesidad de ello para que las cosas vayan mucho mejor.
Otro punto interesante es que cuando se pide perdón, se demuestra que hay un interés real por tener una relación con el otro y construirla juntos, no imponerla ni ser superior en ello.
Para pedir perdón en la pareja, se pueden seguir algunos pasos básicos:
Todo ello está muy lejos del pedir a alguien que te perdone y nada más, sino que hay que hacer un mea culpa de la situación.
Mira otras parejas felices, pregunta y verás cómo viven situaciones así y observa de qué forma las resuelven.